Fuente: LaPrensa.com.ni
Dos enormes documentos publicados por la empresa china HKND en su portal (www.hknd-group.com) revelan que la muy publicitada jornada de arranque de las obras del canal en realidad son pequeñas obras menores que no reflejan —al menos en los datos y en el terreno—, el poderío económico que la citada empresa requeriría para impulsar la obra valorada en 50 billones de dólares.
El Gobierno de Nicaragua y HKND vendieron la idea al mundo, el pasado 22 de diciembre, que las obras del canal iniciaban con todos los fierros, durante la apertura del modesto plantel de carreteras en Brito, donde se hizo el acto oficial de “primera piedra” del Canal Interoceánico por el empresario Wang Jing en la hacienda Miramar, del departamento de Rivas, en un acto celebrado por la concesionaria HKND y representantes del gobierno de Daniel Ortega, así como su hijo Laureano y el vicepresidente Omar Halleslevens. Los obreros con cascos y chalecos naranjas en realidad eran obreros de las alcaldías y las maquinarias eran municipales.
El Estudio de Impacto Ambiental y Social de las Obras de Inicio, en dos volúmenes de más de 400 páginas cada uno que fueron colocados en diciembre pasado, señalan que los trabajos de inicio en realidad son obras modestas que darán trabajo temporal a 150 obreros nicaragüenses.
HKND, Estudio de Impacto Ambiental y Social de las Obras de Inicio.
El documento cita que todas las actividades de construcción, incluyendo las áreas auxiliares, se localizarán dentro del corredor de 50 metros y “por lo tanto, la huella física de las obras de inicio es limitada”.
Las obras iniciaron con un gran acto de celebración oficial en Managua y Rivas, lo cual generó la alarma de pobladores que se oponen al canal y la reacción de desalojo que realizó la Policía Nacional en diciembre pasado, que dejó decenas de golpeados, heridos y detenidos.