Fuente: Tiwy.com
Estados Unidos continúa hundiéndose en el pantano de la crisis de Ucrania. Mientras tanto, China continúa intensificando sus esfuerzos diplomáticos en América Latina. El Ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, recién completó su periplo por América Latina. El ministro visitó Cuba, Venezuela, Argentina y Brasil. El Presidente chino, Xi Yingpin visitará la región el próximo mes de julio.
Beiyín ostenta relaciones de asociación estratégica con La Habana, Caracas, Buenos Aires y Brasilia. A eso se refirió Wang Yi cuando se reunió con Raúl Castro, Nicolás Maduro, Cristina Fernández y Dilma Rousseff. Sin exagerar, él fue recibido con los brazos abiertos. En años recientes, China, de manera notoria, ha fortalecido su presencia en la región. Muchos estados situados al sur del Río Grande ven en las dinámicas inversiones y comercio con China como una contribución importante en la reducción de su dependencia de Estados Unidos con sus incesantes reprimendas y repentinas interferencias, tratando de decirle a todo el mundo qué es lo que tiene que hacer. Los latinoamericanos desean una estrecha colaboración con el Celeste Imperio, el estado que exhibe un progreso acelerado y que mira confiado el futuro para convertirse en el líder de un mundo multipolar.
De acuerdo con lo pautado, la visita del Presidente Xi Yinping a Brasil coincidirá con el anunciado inicio del foro conjunto a nivel ministerial de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe, CELAC, plataforma para la promoción de una asociación cooperativa general que contemple la igualdad, el beneficio mutuo y el desarrollo común de tal modo de salvaguardar del mejor modo los intereses comunes y promover la paz, la estabilidad y el desarrollo regional y mundial. La iniciativa fue unánimemente aprobada por los estados miembros de la CELAC. La idea de una amistad estrecha con China resulta atractiva. La nación china se está aproximando al status de superpotencia y está participando en cientos de proyectos energéticos, de infraestructura, comunicaciones, agricultura, ciencia y alta tecnología. Los líderes de China, Brasil, Cuba, Ecuador, Costa Rica, Saint Vincent y las Granadinas estarán presentes en la ceremonia de inauguración del Foro. La primera reunión a nivel ministerial China-CELAC está programada para fines del 2014.
La visita de Wang Yi estuvo principalmente enfocada en los aspectos prácticos. La zona de desarrollo especial de Mariel, puerto cubano que está en construcción con apoyo financiero de China, fue una cuestión de importancia especial. Este megaproyecto en progreso a 45 kilómetros de La Habana se convertirá en un pilar del desarrollo cubano debido a la ubicación geográfica del puerto, remodelado para equipar un terminal para recibir navíos de gran calado. El proyecto también atraerá inversiones en el campo de la biotecnología, la industria farmacéutica, recursos energéticos renovables, agroindustria, turismo y bienes raíces. La atracción de inversiones extranjeras es una contribución importante para la modernización de todo el país. En Venezuela, ambas partes discutieron la diversificación de la industria del sector gasífero y petrolero y de la expansión del programa de bienestar social que apunta a la construcción de viviendas de carácter social. En Brasil, la protección de las comunicaciones del país anfitrión y de los estados que conforman UNASUR especialmente contra la interferencia de la NSA y CIA de Estados Unidos, fue agregada a la agenda. Las relaciones entre Brasil y Estados Unidos se han deteriorado considerablemente luego de las revelaciones de Edward Snowden. Washington no ha expresado con claridad que siente haber espiado a la dirección política del país, incluyendo a la propia Presidenta Dilma Rousseff. Las noticias en torno a las actividades de Estados Unidos hicieron que muchos brasileños vieran la realidad tal como es, poniendo fin a las fantasías de una asociación igualitaria.
Muchos medios de comunicación informaron que durante su gira, Wang Yi discutió la agenda de las seis cumbres de los países del BRICS con su contraparte brasileño, el Ministro de Relaciones Exteriores, Luiz Alberto Figueiredo Machado. La reunión de los dirigentes del grupo tendrá lugar en la ciudad de Fortaleza entre el 15 y el 17 de julio próximo. El anuncio del lanzamiento de un banco conjunto de desarrollo con acciones de capital autorizado por la cantidad de 50 mil millones de dólares es esperado con gran expectativa. Cualquier indicio de medidas de carácter constructivo que sean tomadas por los BRICS resulta irritante para Estados Unidos. El presidente Obama no ha logrado establecer buenas relaciones con el grupo y Washington carece de los medios para influir en las actividades de la agrupación.
Un ejemplo reciente lo dio el voto de la Asamblea General de Naciones Unidas sobre Crimea en marzo pasado con 4 de los 5 miembros de los BRICS absteniéndose. Cada miembro del grupo BRICS tiene sus propias razones para no confiar en el gobierno de Obama sabiendo que este recurrirá a la presión en vez de comprometerse en un diálogo de iguales.
China jamás ha confiado en la sinceridad de los “socios” norteamericanos. El pivote de Asia anunciado por Estados Unidos es percibido en China como un intento de separarla del resto del mundo. Corea del Sur, Japón, las Filipinas, Malasia y otros países se alinean con Estados Unidos. Noticias recientes del frente anti-China mencionan el acuerdo pactado entre Estados Unidos y las Filipinas sobre bases militares norteamericanas a ser instaladas en este país durante un período inicial de diez años. Por supuesto que China tomará las medidas necesarias para responder e impulsar su potencial defensivo.
China cree en la expansión del interés propio de los BRICS para contrarrestar el dominio financiero de Occidente implementado con la asistencia del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional. El grupo se planteó algunas metas estratégicas como ser el distanciamiento gradual del dólar y la creación de amortiguadores seguros en contra del torbellino financiero. China apoya la posición de Rusia sobre la base que los BRICS deben “transformar el foro para el diálogo en un mecanismo plenamente desarrollado de interacción estratégica.”
A partir de diciembre del 2013 China devino en el tercer más grande socio comercial de América Latina. El ejercicio comercial sigue en alza durante este año. China se ha convertido en el principal consumidor de minerales del continente, lo cual preocupa a Estados Unidos. China importa petróleo, mineral de hierro, cobre, soya y artículos de consumo. La influencia china ha crecido considerablemente a consecuencia del advenimiento de la Alianza Bolivariana de las Américas, ALBA el año 2004. Esta organización es la creación predilecta de Fidel Castro y Hugo Chávez, conformadada con el objeto de contrarrestar la noción de la zona de libre comercio liderada por Estados Unidos.
Estados Unidos ha perdido su poderío financiero luchando por la supremacía mundial y guerras de ultramar. En gran medida China ha tomado su lugar… Durante el año 2013 el total de las inversiones chinas llegó casi a los 17 mil millones de dólares y el país se ha convertido en el principal socio comercial de muchos estados de la región, incluyendo a Brasil. Solo durante el período 2005-2011 América Latina recibió más de 75 mil millones de dólares de parte de bancos chinos. El dinero fue invertido principalmente en sectores de transportes, telecomunicaciones, industria minera proyectos energéticos.
Una de las razones de por qué China invierte en los países latinoamericanos es para impedir que políticos pro-norteamericanos lleguen al poder. Beiyín está interesado en conservar la paz social en los países regidos por gobiernos de izquierda. Esta cuestión estuvo permanentemente en el primer plano de la agenda durante la gira de Wang Yi por América Latina. Venezuela, Ecuador, Bolivia y otros estados están siendo amenazados por acciones de carácter subversivo estimuladas por los servicios especiales de Estados Unidos. El apoyo financiero que estos países obtienen de parte de China se ha convertido en un factor de estabilidad en la región.