Fuente: El nacional
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, se reunió este miércoles con el dueño de la concesionaria china HKND, Wang Jing, para ultimar detalles sobre el inicio de las obras de construcción del canal interoceánico el próximo 22 de diciembre, informó una fuente oficial.
Ortega y Wang “estuvieron conversando todos los detalles de las últimas semanas hacia el inicio de las obras”, fue “una reunión muy importante”, afirmó la portavoz del gobierno, la primera dama Rosario Murillo, a medios oficiales.
La firma china HK Nicaragua Development Invesment (HKND) de Wang, con sede en Hong Kong, obtuvo el año pasado la concesión para construir una vía interoceánica tres veces más larga que la de Panamá, que requerirá una inversión de 50.000 millones de dólares.
El proyecto, uno de los más ambiciosos de América Latina, iniciará en diciembre sin un estudio de impacto ambiental sobre las consecuencias que las obras tendrán en el país, y sin precisar la procedencia de los fondos.
HKND anunció el jueves pasado que el canal comenzará con la construcción de un puerto de descarga en el Pacífico sur y vías de acceso para garantizar la llegada y traslado de los materiales del megaproyecto.
La vía, que partiría en dos a Nicaragua, arrancará en el Pacífico sur, atravesará el Lago Cocibolca, la reserva de agua dulce más importante de Centroamérica, y terminará en la desembocadura del río Punta Gorda en el mar Caribe.
El proyecto ha generado protestas en las comunidades y ciudades que están situadas sobre la ruta canalera, que serán expropiadas por el gobierno de acuerdo con un censo realizado recientemente por los chinos en la zona.
Grupos ambientalistas de Nicaragua han pedido al gobierno que desista del proyecto debido al grave daño que consideran causará al Lago Cocibolca y las reservas que están ubicadas sobre la ruta.
La oposición, por su parte, propuso derogar la concesión a los chinos mediante un proyecto presentado al Parlamento a inicios de este mes. La ley concede a HKND derechos exclusivos para construir y operar el canal durante 50 años, prorrogables por otros 50, incluidos los 5 a 10 años que durará la construcción.