Fuente: Infobae
(Bloomberg) — Burford Capital, que intenta cobrar una sentencia de US$16.000 millones de una corte estadounidense contra Argentina, evalúa si una línea de swap de divisas proporcionada al país sudamericano por China podría utilizarse para saldar la deuda.
La línea de US$18.000 millones, similar a las que China ha utilizado en otros países para aumentar su influencia, se incluyó en una solicitud de información que Burford presentó a última hora del martes en un tribunal federal de Nueva York. El fondo de litigios también requirió información sobre varios activos en el extranjero en poder de Argentina, con la esperanza de poder embargarlos.
Burford compró demandas de accionistas de la petrolera argentina YPF SA por su nacionalización en 2012. En septiembre, la jueza de distrito estadounidense Loretta Preska ordenó a Argentina el pago de una sentencia de US$16.000 millones. Burford obtendrá US$6.200 millones si se paga la totalidad.
Argentina apeló la sentencia, pero Preska autorizó el mes pasado a Burford a iniciar el cobro después de que el país no presentara las garantías necesarias mientras presentaba un recurso.
Además de la línea de swap de divisas, vigente en Argentina desde hace aproximadamente una década, Burford también solicitó información sobre acciones de YPF y dividendos pagados por la empresa, transacciones comerciales y cuentas bancarias en el exterior, y reservas de oro y metales preciosos mantenidas en el extranjero. El fondo presentó al menos 30 solicitudes para el denominado descubrimiento de activos.
Según los abogados de Burford, Argentina ya ha dicho que no tiene que responder a las solicitudes relativas a los activos en poder del banco central de Argentina —incluidos el acuerdo con China y las reservas de metales preciosos— porque son inmunes al embargo.
Burford sostiene que los activos en poder del banco central pueden embargarse si el Gobierno argentino tiene un interés legal o beneficiario en ellos, como, por ejemplo, si se utilizaron para garantizar un préstamo.
La empresa enfrenta una ardua tarea para cobrar la sentencia. Según la legislación estadounidense, la mayoría de los activos de Gobiernos extranjeros no pueden embargarse. Paul Singer, de Elliott Management, pasó 15 años intentando cobrar otra sentencia en nombre de los tenedores de bonos perjudicados por el default argentino de principios de siglo. El caso se resolvió finalmente con un acuerdo histórico de US$4.650 millones en 2016.
Argentina también podría tratar de alargar el caso de YPF con apelaciones, pero tener la sentencia pendiente también podría obstaculizar los esfuerzos del país asediado para acceder al capital internacional.
Traducido por Paulina Munita.
Nota Original: Argentina’s $18 Billion Chinese FX Line Eyed for US Judgment