Fuente: Diario de Cuyo
Autoridades y empresarios argentinos negocian en China la aprobación de la tecnología Enlist de la firma Dow, que aporta a la soja resistencias a nuevos herbicidas para malezas e insectos, y promete mejoras en la producción de la oleaginosa.
‘Luego del buen diálogo del viernes por la noche (hora Argentina) mañana del sábado en China entre Macri y el
presidente chino Xi Jinping esperamos que la aprobación se acelere‘, contó a Télam un integrante argentino de la comitiva.
Desde la Asociación de Semilleros Argentinos, que participa activamente de los procesos aprobatorios de China en este tipo de eventos, consideraron que ‘todos los funcionarios argentinos vienen empujando el tema, pero hay que ser muy cautos porque todos los procesos en China son muy meticulosos y suelen demorarse‘.
Según señalaron a Télam fuentes oficiales, hace diez días las autoridades chinas se comprometieron a acelerar al máximo el proceso de negociación.
En el marco de la visita a China del presidente Mauricio Macri por la cumbre del G-20, funcionarios argentinos, empresarios y miembros del Comité de Biotecnología de ambos países trabajan para que el Ministerio de Agricultura chino (MOA) apruebe la soja Enlist de Dow, que forma parte de la nueva generación de eventos que aportan resistencia a nuevos herbicidas, además del glifosato.
El Sistema de Control de Malezas Enlist es una tecnología de la empresa Dow que combina eventos biotecnológicos en soja y maíz tolerantes a múltiples herbicidas con nuevas tecnologías de formulación.
La empresa espera que obtener las correspondientes aprobaciones de los países importadores, como China, para comenzar la comercialización en Argentina, que permitirá a los productores contar con alternativas para el manejo de malezas resistentes y difíciles de controlar, una situación que afecta la producción y exportación de esta oleaginosa.
En el encuentro con su colega chino, Xi Jinping, Macri también propuso incrementar el flujo turístico desde ese país hacia Argentina al tiempo que se entrevistó con distintos empresarios de ese país asiático que le manifestaron la intención de invertir en la obra pública argentina.
La reunión con Xi Jinping le sirvió a Macri para plantear la necesidad de buscar un equilibrio en la balanza mercantil y analizaron las obras e inversiones que la nación asiática tiene en marcha en territorio argentino. En ese marco, Macri abogó para que Argentina pueda venderle a China alimentos con valor agregado, además de la soja, ‘porque es una manera de generar más empleo y combatir la pobreza‘.