Fuente: ElPeriodicoVenezolano
La preocupación por la situación de la economía china provocó el hundimiento de las bolsas asiáticas, que luego arrastraron a las plazas de todo el mundo, en un lunes negro provocado por el temor en los inversores por las perspectivas de la economía mundial. Shanghai lideró el desplome general, con una caída del 8,49%, después de haber llegado a perder el 9% durante la sesión, y cerró en su nivel más bajo en ocho años, con 3.209,91 puntos. La semana pasada había bajado más del 11%.
El Nikkei de la Bolsa de Tokio cerró la jornada con una pérdida del 4,61%, cayendo a su nivel más bajo en seis meses, tras cinco sesiones consecutivas en rojo.
La situación reveló como inefectivas las masivas intervenciones del gobierno de Pekín desde hace semanas en los mercados, pues las caídas de los últimos días borraron de un plumazo todas las ganancias que se habían producido en lo que va del año.
También Hong Kong se vio afectada, donde el índice Hang Seng bajó un 5,17 por ciento, en tanto que la Bolsa de Taipei en Taiwán perdió un 4,8 por ciento. En India, el Sensex retrocedió un 5,94 por ciento hasta los 25.741,56 puntos, su peor caída desde enero de 2008.
EN EUROPA
La ola de contagio llegó hasta Europa, donde las principales plazas bursátiles abrieron con pérdidas de alrededor del 2,5%, que se profundizaron con el paso de las horas por el desplome de las bolsas chinas, la apreciación del euro y la caída del precio del petróleo.
La Bolsa de París fue la más afectada: perdía más del 7,5 % a dos horas del cierre de la sesión, ante las informaciones sobre el agravamiento del descenso del petróleo después del catastrófico día en los mercados asiáticos.
A las 15.40, el CAC-40 bajaba un 7,85 % y, al situarse en 4.267,66 puntos, se colocó por debajo del nivel con el que había comenzado el año. Se trata del mayor descenso registrado en una sola jornada en 2015.
Con esa cotización, el principal indicador de la bolsa parisina había perdido un 14,39 % en una semana y un 16,03 % en un mes.
En tanto, a esa misma hora, en la Bolsa de Milán veinte de los cuarenta valores que cotizan en el selectivo estaban suspendidos, mientras su índice selectivo FTSE MIB caía un – 7,21 %, hasta situarse en 20.178,96 puntos y el índice general FTSE Italia All-Share perdía un – 6,96 %, hasta las 21.751,66 unidades.
El DAX 30 de la Bolsa de Fráncfort se desplomó hoy más de un 7% y luego redujo su caída a un 6 %, hasta unos 9.526 puntos a esa hora.
En tanto, la Bolsa de Londres perdía el 5,49 % a menos de dos horas del cierre. El FTSE-100, índice de referencia en Londres, cotizaba esta tarde en 5.848,13 enteros, una pérdida de 339,52 puntos respecto a la apertura, si bien durante la sesión llegó a transitar por debajo de la barrera de los 5.800 puntos.
En una Grecia en plena crisis, la Bolsa de Atenas cerró con fuertes pérdidas, que alcanzaron el 10,54 %, y su índice general se situó en los 568,38 puntos.
Mientras tanto, el euro subía y se cambiaba a 1,1628 dólares, frente a los 1,1494 dólares a media jornada y los 1,1427 dólares en las primeras horas de la negociación europea del mercado de divisas.
WALL STREET
Wall Street también tuvo un inicio de semana complicado y en los primeros minutos de contrataciones el Dow Jones llegó a perder más de 1000 puntos, aunque media hora después se moderaban las caídas en sus tres indicadores.
El Dow Jones perdía a las 10.30 local un 4,22 % (-695,10 puntos) y se situaba en 15,764,65 enteros, tras haber caído en los primeros minutos de contrataciones a 15.370,33 unidades.
El índice Nasdaq caía un 4,55 % (-214,23 puntos) hasta 4491,81 unidades, tras haberse desplomado a 4292,14 enteros en el arranque, mientras el S&P 500 bajaba ahora un 4,09 % (-80,66 puntos) hasta 1890,23 enteros, tras haber bajado a 1867,01 unidades.
Nunca antes el Dow Jones se había hundido tanto en el arranque de una jornada. El anterior récord fue el 29 de septiembre de 2008, en plena crisis financiera, cuando esa referencia de Wall Street se desplomó 777 puntos, según apuntaba la cadena de televisión CNBC.
La bolsa neoyorquina ya había retrocedido fuertemente el viernes, cuando el Dow Jones Industrial Average sufrió su peor baja en una sola sesión en cuatro años al caer 3,12% y terminar en 16.459,75 puntos, su nivel más bajo desde octubre de 2014. El Nasdaq había perdido todavía más: 3,52% para cerrar en 4.706,04 puntos.
AMÉRICA LATINA
Los mercados financieros latinoamericanos también se vieron arrastrados por el desplome en su apertura.
En México, el índice de bolsa IPC abrió con una caída del 4,54 por ciento a 40.259,18 puntos a las 1353 GMT, mientras que en Brasil, el Bovespa de la Bolsa de San Pablo se hundía 4,99 por ciento a 43.437,1 puntos. Las monedas de las dos principales economías latinoamericanas también caían a mínimos.
La bolsa argentina también colapsó. El índice Merval de Buenos Aires caía un 5,05 por ciento a 9.965,07 unidades a las 11.10, con lo que acumula una seguidilla de seis sesiones en baja durante las que cae un 14,65 por ciento.
El índice de acciones IPSA, que reúne los 40 principales títulos de la Bolsa de Santiago, perdía un 3,05 por ciento a 3.606 puntos a las 11.05 hora local.
PREOCUPACIÓN GLOBAL
Las principales causas de la ola de ventas son la inseguridad sobre la marcha de la economía global; la preocupación de que China, como motor del crecimiento mundial, vaya más lento de lo previsto; así como la decepción de los inversores que esperaban nuevas inyecciones de fondos públicos por parte de Pekín.
La sorpresiva devaluación del yuan el 11 de agosto -percibida como un intento desesperado de las autoridades chinas para impulsar sus exportaciones y su actividad económica– no hizo más que aumentar la inquietud general, causando una oleada de impactos en los mercados.
Desde entonces, se han esfumado al menos el equivalente a 5 billones de dólares en valor de las Bolsas mundiales.
Con un espíritu tranquilizador, Pekín anunció ayer que el gigantesco fondo de pensionesnacional invertirá en las bolsas.
El fondo de pensiones podrá invertir hasta un 30% de sus activos netos en acciones. Con anterioridad, sólo podía invertir en bonos del Tesoro y depósitos bancarios.
Al margen de las preocupaciones sobre China hay incertidumbre sobre si -y cuándo- el banco central estadounidense, la Fed, decidirá aumentar las tasas de interés. Aunque en Tokio se esperan ahora compras para aprovechar los bajos precios, el mercado seguirá en una fase de corrección hasta que esté claro cuándo la Fed subirá las tasas, indicaron los expertos.